Y quiero cantar, y quiero cantar, ya ni tu cara me importa mirar, porque lo que hice no fue más que una satisfacción. Hace mucho no soñaba así, y en la mañana me gusta bajar, para saber que fue una noche más. Y elegir, es lo que me hace reír, poder salir con variantes distintas porque ya tu cara no me importa mirar.

Ella lejos se va, ella no sabe que papel es mejor en este juego. La besa, pero aveces no siente amor. Las mañanas son cortas, pero ella simplemente no sabe. No puede distinguir un juego de sabanas de un beso. Y por la noche no son mas que desconocidos. Locos de calor, caminan muy separados del sol.

No me piques con tu veneno maldito, ya morí muchas veces. No busques maneras, la vida es así. La noche era perfecta pero la mañana nos arruino. No hay miradas dulces ni noches largas, cantemos esta parodia del amor, que nos cansa toda la vejez.

El amor es una pena que vale vivirla, al máximo.

Cruel realidad

Niños sean niños, hay tiempo para crecer. Adultos, sean adultos, disfruten esa autoridad. Para los del medio, disfruten ese balance perfecto, entre juego y responsabilidad. 
En definitiva, el ser humano nunca se termina de conformar.
Los niños, juegan a la mamá y el doctor, mientras que los adultos toman decisiones inmaduras todo el tiempo.

El mundo sigue en vigilia, el mundo parado, expectante. El mundo es él, no hay mas. Gira y gira como loco. La calesita sin estrenar, niños sin infancia. Si la vida fuera una, sería mas apasionante, ¿no?

Mitad de corazón

Es mágico el poder, es mágico el sabor, de tus ojos rojos.  En esta noche lluviosa y hambrienta no encuentro solución. Esta turbia sensación de fracaso, este lamento rutinario. Me asquie de las formalidades y sin embargo algo siempre me lleva a marcarlas. 
Hace tiempo ya, que no canto, ni bailo, ni salto como antes, algo me esta faltando, algo que nunca tuve.
Por mas que me esfuerce siempre algo falta, y sera que porque nací así, con mitad de corazón. 
Busco historias que me apasionen y no cuentos infantiles.